NADIR: descolonizar las representaciones

NADIR
GRUPO DE TRABAJO PARA LA
DESCOLONIZACIÓN DE LAS REPRESENTACIONES

Este grupo se formó en un principio con el objetivo de trabajar en la descolonización de la mirada, con las herramientas conceptuales de la antropología visual, desarrolladas por Adolfo Colombres en su libro Cine, antropología y colonialismo, pero un tiempo después resolvió extenderlo al teatro, la danza, las artes visuales y otras manifestaciones artísticas, sin modificar el punto de mira.

Ciertas corrientes culturales y artísticas se han dejado seducir por la consigna de suprimir al territorio como eje del pensamiento, argumentando que el proceso globalizador habría vuelto obsoleto todo discurso realizado desde la afirmación de un espacio geográfico, político, simbólico o identitario particular. La comprensión de un mundo desterritorializado, argumentan, requiere un punto de vista también desterritorializado. Con ello se nos sugiere no pensar el mundo desde nuestras propias sociedades americanas, sino desde su flujo (como si éste fuera una ineluctable corriente marina y no producto de una dominación), y hacernos luego las preguntas pertinentes a nuestras realidades particulares, claro que sin más propósito que acomodarnos a dicho flujo con el mejor sentido práctico. Se podría responder a este pragmatismo, tan dispuesto a entregar nuestros más caros valores, con unos versos del poeta antillano Aimé Césaire, que dicen:

“Acomódense ustedes a mí, / yo me acomodaré a ustedes”.

El camino, entonces, es pensar el mundo desde nuestro propio ser, con todas las marcas de nuestra cosmovisión, y luego recién observar ese turbio flujo globalizador regido por la cultura de masas y entregado sin tapujos a la sociedad de consumo, para saber en qué se opone a muestro proyecto y definir una estrategia de acción cultural y política alternativa.

La palabra “Nadir” nombra la tierra que pisamos, y apareja en nuestro caso un pensamiento y una creatividad territorializados, que buscan la profundidad y no la evasión del vuelo, o sea, situándose con énfasis en un lugar antropológico, donde la identidad se manifiesta de un modo explícito.

NADIR, Grupo de Trabajo para la Descolonización de las Representaciones, no conforma una empresa cooperativa ni, por ahora, una asociación civil, sino tan solo un colectivo que se propone trabajar en forma solidaria. La idea que lo estructura es, como se dijo, propender a una nueva mirada sobre los hechos sociales, políticos y culturales, a fines de contribuir a la descolonización de los imaginarios y los paradigmas que aún rigen las ciencias humanas y las manifestaciones artísticas. Sus integrantes pueden actuar por separado en un determinado proyecto, pero contarán siempre con el apoyo y asesoramiento de los otros miembros del grupo, para que el enfoque de los temas se ajuste a sus principios rectores.